Aries goza de una gran virtud, de las cuales sus parejas se ven muy beneficiadas. Su gran inteligencia emocional. Son personas muy sensibles y generosas, sin embargo son fácilmente irritables. A veces caen en la queja y crítica casi permanente. Cuando eso sucede no les gusta que se lo digan, y suelen negar su comportamiento. No obstante, saben manejar aquello que los enoja y pueden llegar a ser muy diplomáticos, aunque internamente estén por explotar. Son personas con mucha calma, y con gran espíritu de investigación. Eso los transforma en personas de mentalidad muy abierta y siempre dispuestas a experimentar cosas nuevas.
Lo mejor de vivir con Aries
Aries puede identificar a la perfección lo que su pareja siente o piensa. Tiene una gran capacidad de empatía, y no juzga a su pareja cuando se equivoca. Si bien tiende a corregirla con frecuencia, su intención siempre es constructiva. El también acepta de muy buen agrado cuando alguien le critica algo. No le gustan las mentiras, y aunqeu a veces le pueda costar, los arianos no mienten. Prefieren perder que convivir con una mentira, pues ellos saben que no lo resistirán por mucho tiempo.
Cuando la pareja de Aries tiene un problema, este signo acude inmediatamente a ayudar. No importa el sacrificio que eso le significa, pues su pareja es lo más importante. A Aries les cuesta dar el sí, pero cuando se entregan lo hacen con total plenitud. Son muy buenos amantes y muy pasionales. No se guardan nada para ellos, y todo lo manejan en término de “nosotros”. Cuando la pareja pasa por una crisis, será Acuario el signo que más luche por salvar la situación. Ellos han elegido a esa persona y desean que sea para toda la vida.
Lo más difícil de convivir con Aries
A los arianos les suele costar mucho encontrar un plan de vida. Fijarse objetivos es algo que no saben hacer, pues dudan mucho y de todo. Aunque comprenden que es necesario fijarse metas, no encuentran los mecanismos para lograrlo. Es con mucha paciencia, y mucho apoyo de su pareja que pueden lograrlo. En una pareja con Aries, será el otro el que deba poner la mayor parte, a la hora de concretar planes como comprar una casa o decidir el lugar donde sus hijos estudiarán. Los arianos no suelen tomar iniciativa, pues en el fondo son personas muy inseguras.
La inseguridad de Aries lo puede llevar a vivir períodos de gran inestabilidad. Incluso pueden tomar reacciones un tanto inmaduras. Por momentos se olvidan que son adultos y sueñan con vivir experiencias de adolescente. Es aquí cuando la pareja tiene que poner a prueba su paciencia, y ser capaz de mostrarle a Aries, que no es el momento de llevar a cabo sus planes. Los arianos son dóciles y su mentalidad abierta les permite comprender sus propios defectos. Rápidamente vuelven atrás y reorientan sus ideas. Pero al poco tiempo, no es de sorprender que tengan alguna ocurrencia un tanto “descabellada”.
