Meditar con los arcanos del Tarot puede ser una terapia reveladora y edificante, donde encontrar respuestas a las dificultades que se están atravesando.
Trabajar con los arcanos cuyas energías están directamente ligadas a la naturaleza cósmica de su signo zodiacal hace de la tarea de meditación algo aún más efectivo.
Aun si usted no es nativo del signo de Leo puede usar esta meditación sea cual sea su signo en el periodo en el que el Sol se encuentra en tránsito por el signo de Leo. Teniendo, de esta manera, la oportunidad de trabajar la zona de su carta astral número uno y los temas que rigen.
El período en que el Sol pasa a través de Leo este es un excelente momento para meditar con las cartas de La Fuerza y El Sol, así como los bastos de los arcanos menores. Estudie sus imágenes, busque las posibles interconexiones, y reflexione sobre la manera en que las imágenes y los elementos de la carta se conectan con su vida interior y exterior.
Leo tiene como regente al Sol, y de él proviene la vitalidad y el brillo que los caracteriza. Meditar con las cartas del Tarot mencionadas ayuda a explotar y alimentar las cualidades del propio Sol de cada signo, es decir la manera en la que cada signo se autoafirma y pone en manifiesto su naturaleza básica y cualidades especiales.
Una de las cualidades que podemos trabajar y adoptar mediante la meditación con el signo de Leo y sus cartas del Tarot afines es la inteligencia social, la manera en la que nos comunicamos con nuestro entorno y como esta resulta determinante a la hora de concretar nuestros propósitos y hacer llegar nuestro mensaje en la manera apropiada.
Para prepararse para la meditación, sentarse o acostarse en un lugar cómodo y permitir que su cuerpo esté libre de tensión y distracciones. Preste atención a su respiración. Sienta como su respiración entra y sale mientras inhala y exhala. Si los pensamientos lo distraen, enfoque su mente, simplemente observe sus pensamientos y deles el permiso de flotar libres, luego regrese suavemente su atención a su respiración. Cuando haya establecido un ritmo estable, cómodo de respirar rítmicamente dentro y fuera, cambie su enfoque a la carta del tarot que ha seleccionado para la meditación.
Observe la carta y contemple sus imágenes. Imagínese a usted mismo como un personaje o elemento en la carta. En el ojo de su mente, introduzca la carta y se conviértase en parte de su escena. ¿Qué está pensando y sintiendo? ¿Qué preguntas le son formuladas por los otros personajes de la carta? ¿Qué esperan de usted? ¿Cuál es la historia que subraya la escena en la carta? ¿Cómo se relaciona esta historia con su propia vida? Tómese su tiempo jugando a introducirse en la historia como si estuviera en un sueño. Cuando haya completado su meditación, es posible que desee registrar sus observaciones en un cuaderno para así hacer un seguimiento y que estos datos le sirvan como referencia futura.